Según la psicoterapeuta Amy Morin, autora del libro 13 Things Mentally Strong Parents Don’t Do (13 cosas que los padres mentalmente fuertes no hacen), existen frases que los progenitores dicen con frecuencia a sus vástagos en un afán de hacerlos sentir mejor, sin embargo dichos comentarios pueden resultar perjudiciales para su fortaleza mental.
1. “No es para tanto”
Ya sea que tu hijo esté preocupado por un examen o que se haya peleado con alguno de sus amigos, no busques aminorar la preocupación diciendo “no es para tanto” porque para tu hijo sí lo es y al platicarlo lo está resaltando. Así que en lugar de minimizar el problema, dale elementos para lidiar con la situación.
2. “Deja de llorar”
No tiene nada de malo llorar. ¡Claro!, si tu hijo está haciendo un berrinche en una sala de cine, tienes que corregir la situación. No se trata de censurar las emociones, sino los comportamientos inadecuados.
3. “Eres el más listo de la escuela”
Cualquier halago exagerado puede resultar prejudicial para tu hijo o hija. Mejor enfócate en dar señales de aprobación genuinas, y que estén más enfocadas en su esfuerzo que en las metas.
4. “Todo saldrá bien”
Es natural que quieras aliviar la preocupación de tus hijos. Sin embargo hay ocasiones en que las cosas no van a salir del todo bien, tarde o temprano se encontrarán con dificultades e incluso tragedias. Incúlcales que tienen lo necesario para enfrentar los retos que les presentará la vida.
5. “¡Cálmate!”
Difícilmente alguien se va a calmar con solo decirle que lo haga. De hecho, decirle a un niño “¡cálmate!” suele ser señal de frustración por parte del padre o la madre.
Lo más recomendable es dar herramientas para que tu hij@ logre la estabilidad emocional por sí mismo. Como por ejemplo, respiraciones profundas o dar una caminata.
